Rey Juan Carlos
El barco del rey emérito no encuentra comprador a pesar de que estuvo de moda durante décadas. Ni rebajando su precio de venta original a más de la mitad consigue salir del mercado.
El yate 'Fortuna' fue protagonista durante varios años de los veranos de la Familia Real en Mallorca. Sin embargo, el rey emérito, Juan Carlos I, renunció a él en 2013 y desde entonces está a la venta. Ocho años más tarde y con el precio rebajado hasta en tres ocasiones, el yate del rey Juan Carlos no encuentra comprador.
El director del Ocean Dreams Mallorca, Jorge Seoane, advierte que el 'Fortuna' es un yate que tecnológicamente hoy en día ya está muy desfasado. Algo que también recalca Miguel Navarro, experto en náutica. "No sabemos en este momento en qué condiciones está" señala a Antena 3 Noticias. Además, asegura que ponerlo en uso otra vez también sería muy costoso.
De 8 millones a 2'2 y aun así, nadie lo quiere
El precio del yate 'Fortuna' del rey Juan Carlos I ha sido rebajado varias veces, pero no hay quien desee volver a sacarlo a flote. Su primer precio de venta fue de 8 millones de euros, una cifra bastante rebajada si se tiene en cuenta que su precio original fue de 20 millones. Sin embargo, ni rebajándolo más de la mitad de su precio, consiguieron venderlo. Por eso, se intentó vender a la mitad, 3,9 millones, pero tampoco hubo suerte. Posteriormente, se rebajó a 2,2 millones de euros, aunque no hubo éxito.
Los problemas para venderlo han hecho que el anuncio se retire de las páginas de ventas, aunque de momento se desconoce qué pasará con el yate.
Un barco de portada
Durante más de una década, el 'Fortuna' del rey Juan Carlos fue el barco de moda. Cada verano podíamos ver a la familia real disfrutando a bordo del 'Fortuna'. Y no solo el rey Felipe VI, la reina Letizia o las infantas navegaron a bordo, sino que también acogió a invitados de la talla de la princesa Diana de Gales, la familia Clinton o los reyes belgas. Ahora, el que fue un regalo de la familia Matutes, no tiene ni visitas, ni viajeros a bordo. Y no parece que las imágenes de este yate ocupado vuelvan a repetirse.