Volcán Cumbre Vieja
El volcán de Cumbre Vieja sigue su actividad eruptiva y entra de nuevo en una fase más explosiva con las coladas de lava más fluidas.
El volcán de Cumbre Vieja en la isla de La Palma podría estar de nuevo reactivándose. El volcán expulsa ahora más ceniza y la lava es más fluida y ha pasado de mostrar signos de agotamiento a una fase más explosiva.
Los expertos no descartan que la actividad del volcán de La Palma vuelva a ser como la del principio de la erupción, hace ya dos meses. Y la gran cantidad de ceniza supone un serio allí en la isla de La Palma.
El cono del volcán ha vuelto a derrumbarse el magma, se ha reactivado la colada que avanza entre las montañas de Todoque y la Laguna, dos coladas se han unido transportando lava más fluida."El volcán no sorprende día a día", comenta Miguel Ángel Morcuende, director técnico de Pelvoca.
El volcán de Cumbre Vieja sigue lanzando piedras con gran fuerza y gran altura y ha cambiado las últimas horas. Los expertos no descartan que el proceso eruptivo vuelva al inicio: "Puede haber otra fase de explosividad, claramente", comenta Morcuende.
Según el Catastro, hay 1.467 edificaciones arrasadas por la lava, de las cuales 1.184 son de uso residencial, 154 agrícola.
Récord de terremotos
Se han batido récord de seísmos en la isla. El miércoles se registraron 300 temblores en un solo día. En las últimas horas se ha producido un terremoto de 4,6 y otro, de 4,4. Este elevado número de terremotos podría estar dando una pista de lo que vendrá podría ser una recarga de magma.
La calidad del aire empeora
La calidad del aire en la vertiente oeste de La Palma es desfavorable o muy desfavorable en cuanto a la afección por dióxido de azufre y partículas en suspensión.
Respecto al dióxido de azufre, se han alcanzado niveles muy desfavorables en Los Llanos de Aridane y Puntagorda, donde se superó el valor límite diario, mientras que en el resto de estaciones de la isla los niveles son buenos o razonablemente buenos.
Se prevé que el viento role a componente oeste hacia el final de la mañana del jueves, en un giro que provocará que la nube de cenizas y dióxido de azufre gire hacia el este y por lo tanto, a partir de la madrugada del jueves al viernes el escenario será desfavorable para la operatividad aeronáutica, principalmente en el aeropuerto de La Palma.