Accidente en Mislata
La normativa estipula que cuando se superan los 38 kilómetros por hora se deben suspender las actividades en las colchonetas hinchables a pesar de que estén bien ancladas al suelo.
La policía que se ha hecho cargo de la investigación sobre del accidente en el castillo hinchable en Mislata (Valencia), donde perdió la vida una niña y siete más sufrieron heridas -una de ellas de gravedad- continúa tratando de resolver el motivo por el que la colchoneta se vino abajo tras la fuerte ráfaga de viento.
El Ayuntamiento insiste en que la atracción de la feria cumplía la normativa vigente pero, la realidad, es que no debía de estar abierta si el viento superaba los 38 kilómetros. Después de comprobarse, se ha descubierto que el viento superaba los 50 kilómetros por hora en el momento en el que ocurrió el terrible accidente en Mislata. Incluso, en una zona cercana a donde estaba instalada el castillo hinchable, el viento superó los 70 kilómetros por hora.
Otra menor hospitalizada de gravedad
Además, ahora se sigue muy pendiente del estado de la otra menor herida de gravedad de tan solo cuatro años de edad. La investigación continuará abierta hasta que se consigan esclarecer las causas del accidente en el que falleció otra niña de ocho años.
En este caso, parece que el anclaje si estaba bien hecho, sin embargo, los fallos más comunes suelen ser también por "no respetar la meteorología", como asegura Raúl Galeano, perito judicial del área de hinchables.
Cuando las rachas de viento superen los 38 kilómetros por hora o, por ejemplo, se vean "mover las ramas de un árbol" debe una señal de alerta para que se prohíba el uso del hinchable y también es necesario contar con varios puntos de anclaje.