Sucesos
Las impactantes imágenes muestran cómo un auto cae sobre otros dos y evita tocar el suelo. No ha habido ninguna víctima y el conductor ha resultado ileso.
Tremendo susto se ha llevado un conductor y quienes presenciaron este incidente en Sigüenza, Guadalajara. Un coche se ha precipitado sobre la acera cayendo entre otros dos que han impedido su impacto sobre el suelo, tras haberle fallado los frenos. Por suerte, no ha habido ningún afectado.
Eran aproximadamente las 13:12 horas de la mañana cuando, en la calle Villaviciosa de la localidad guadalajareña, un Opel Corsa blanco caía sobre la acera situada al lado del Palacio Episcopal. El coche circulaba por la Travesía San Antonio y de un momento a otro, le fallan los frenos y llega a estrellarse contra una valla de metal. Su conductor, que permaneció incluso en el momento del impacto en el interior del auto, argumenta esto diciendo que se puso a tocar desesperadamente el claxon para alarmar a todos los que pudieran estar presenciando el suceso.
Las imágenes del sorprendente incidente muestran la forma en la que de manera milagrosa el coche no puede dar un giro de 90 grados y termina saltando un muro de un metro para estrellarse sobre otros dos autos. Concretamente, se precipita sobre un Ford Focus y un Toyota Yaris, que consiguieron frenar la caída para evitar un impacto mayor sobre el suelo. Sin embargo, estos dos autos terminaron siendo destrozados, uno en su parte trasera y el otro en la delantera.
Afortunadamente, el conductor que se encontraba dentro del coche no ha sufrido heridas de gravedad. Este era el primero que tenía más peligro por el fallo de los frenos, al igual que las personas que caminaban en la zona. De forma milagrosa, en el momento en que se precipita el auto no está circulando ningún individuo por esa acera, lo cual deja solo en un susto el suceso.
Tras producirse el hecho, las personas que presenciaron el precipicio del auto dieron la voz de alarma. Los bomberos acudieron inmediatamente al enclave en el tuvo lugar el impacto para estabilizar el vehículo y conseguir sacar de su interior al individuo, un hombre de unos 50 años de edad. Paralelamente, una ambulancia de Soporte Vital Básico y efectivos de la Guardia Civil acudieron de momento al lugar para atender al conductor, que no necesitó ser trasladado a ningún centro hospitalario.
Por suerte, este incidente no ha llegado a males mayores a pesar de generar el pánico entre las personas que caminaban por el área. Un milagro parecido se vivió a comienzos de este año en California, donde una familia se precipitó con su coche sobre un acantilado de 76 metros y resultan ilesos.