VÍDEO | Así conducía un motorista por las calles del casco urbano de Logroño mientras se grababa con el móvil

La Guardia Civil ha investigado a un varón de 36 años que se dedicaba a grabarse pilotando su moto y cometiendo varias infracciones de tráfico por el centro de Logroño para después publicar los vídeos en Instagram.

Los vídeos dejan clara la prueba de los diferentes movimientos que ejecuta poniendo en riesgo su vida y la del resto de conductores y viandantes, por los que mostraba desprecio.

Adelantamientos, invasión de aceras, intersecciones atravesadas... son solo algunas de las infracciones que comete al tiempo que él mismo, o ayudado por otro conductor, se graba.

En las imágenes se le ve recorriendo hasta 200 metros con la rueda delantera de la moto levantada, en lo que se conoce como "caballito". Una acción prohibida y peligrosa, aún más, teniendo en cuenta que por donde la realiza es pleno casco urbano de la capital riojana.

En otra de las grabaciones se le puede ver circulando a 106 kilómetros por hora en una carretera limitada a 30km/h y señalizada como zona escolar, teniendo un viandante que echar a correr en un paso de cebra para no ser atropellado.

Un total de siete vídeos publicados en su propia cuenta de Instagram han servido a la Guardia Civil para dar con él, dejando constancia de sus deplorables actos e incluso mofándose de ello. "Qué majete el alcalde que nos ha puesto saltos", se burla al atravesar un badén de la ciudad.

Estos actos y la publicación de los vídeos han llevado a la Guardia Civil ha realizar una investigación por un delito continuado de conducción temeraria. El investigado y las diligencias practicadas han sido puestas a disposición de la Autoridad Judicial y de la Fiscalía de Seguridad Vial.

Detenido por conducción temeraria en la Calle Larios de Málaga

Un hombre fue detenido en Málaga en marzo de 2023 cuando irrumpió en la calle Larios con la música a todo volumen y ante la sorpresa de un gran número de viandantes que, un tanto asustados, se apartaban para evitar ser atropellados, ya que el conductor no tenía intención de aminorar la marcha.

En cuanto la Policía Local de Málaga se percató de la situación, trató de dar el alto al individuo, le persiguieron durante varios metros, incluso con el uso de sirenas para que parara el vehículo. Pero el conductor continuó circulando hasta la altura de calle Granada dónde la situación se complicó, aún más, por la presencia de las terrazas de algunos bares y restaurantes y una gran aglomeración de personas.

Según apunta el atestado policial, el hombre no atendía a los requerimientos policiales debido al alto volumen de la música que le impedía escuchar o percatarse de lo que estaba ocurriendo a su alrededor.

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