Costa de Angola
Uno de los náufragos, entre los que figuran cinco marineros gallegos, ha grabado desde la balsa salvavidas cómo las llamas han devorado gran parte del casco del barco poniendo sus vidas en peligro en la costa de Angola: "¡va a reventar todo porque está lleno de gasoil!", se escucha gritar a uno de los pescadores.
Un angustioso rescate
En el momento crítico del rescate, uno de los náufragos ha conseguido grabar con su propio móvil desde la balsa salvavidas cómo el fuego se extendía por el casco del barco siniestrado. "¡Se nos va el barquito, carajo!", exclama mientras apremia a sus compañeros para que remen y consigan alejar la balsa del peligro.
Las columnas de fuego y humo amenazan con provocar una explosión y el marinero advierte del riesgo: "¡va a reventar todo porque está lleno de gasoil!, ¡va lleno de gasoil!, ¡sigue, sigue remando un poquito más!". "Traté de salvarlo, todos los suministros de agua, todos mal y atajados… ¡no hay manguera!", se lamenta.
Salvamento Marítimo ha coordinado desde su centro en Madrid el operativo de rescate de los treinta tripulantes del pesquero donostiarra Fígaro, propiedad de la empresa gallega Freiremar, que sufrió un incendio cuando navegaba a unas 21 millas al norte de Lobito, en aguas de Angola.
Al recibir la alarma, Salvamento contactó con las autoridades angoleñas y emitió alertas de socorro por onda corta y por satélite para movilizar a los barcos que faenaban por la zona. El remolcador "Couper Tide" llegó a tiempo para auxiliar a los tripulantes, que pudieron abandonar el pesquero y ponerse a resguardo a bordo de cuatro balsas salvavidas.
Los marineros, que no han sufrido daños personales, están siendo ya trasladados a puerto. La tripulación está formada por cinco trabajadores gallegos, dieciséis de nacionalidad angoleña, cinco senegaleses, tres peruanos y un ghanés.
En estos momentos el Fígaro sigue a flote. Continúa a la deriva ya sin llamas pero de su estructura sigue saliendo humo. Será ahora el armador quien se haga cargo de la embarcación.