Sucesos
Los okupas han lanzado objetos contra los periodistas que cubrían el suceso, entre ellos un mueble y una televisión. Por el momento, se ha conseguido desalojar tres plantas del inmueble.
Suceso con graves altercados y un vigilante de seguridad apuñalado en Majadahonda. Ha ocurrido durante el desalojo de un edificio de lujo de once plantas okupado. El propietario del edificio de la calle Ciriaco García número 6 contrató a la empresa 'Desokupa' con la intención de recuperar el inmueble. Allí residen de manera ilegal una veintena de magrebíes. Compañeros de Espejo Público que se encontraban trabajando en la zona han sido agredidos por los okupas.
Ha sido sobre las 6:50 horas cuando ha comenzado el desalojo, produciéndose momentos de gran tensión por altercados entre los okupas, agentes de la Guardia Civil e integrantes de 'Desokupa'. Los okupas se han enfrentado con machetes y piedras contra todos los que trataban de acceder al edificio.
Entre tanto, un vigilante de control de acceso ha sido apuñalado en la mano, necesitando asistencia sanitaria. Los okupas también han lanzado objetos contra los periodistas, entre los que se encuentran un equipo de Espejo Público, que estaban allí cubriendo el suceso. Entre otros objetos que les han lanzado, un mueble y una televisión.
Este jueves se solicitará una medida cautelar de desalojo inmediato al juzgado aportando pruebas de que hay una banda organizada de delincuencia habitando el inmueble. "Confiamos en que con todo lo sucedido esta mañana con las agresiones, las pedradas y el apuñalamiento en 48 horas habrá un desalojo", ha confiado Daniel Esteve, responsable y fundador de 'Desokupa' a Europa Press.
En este operativo han intervenido una treintena de agentes de la Benemérita, Policía Nacional, Policía Local e integrantes de la empresa.
Agreden a un equipo de Espejo Público
Las imágenes que acompañan esta noticia hablan por sí solas. Son escenas de tensión que se llevan viviendo desde hace meses cuando se intenta desalojar el edificio.
Nuestra compañera Vanesa Pámpano se ha desplazado junto a un cámara del equipo de Espejo Público para cubrir el suceso cuando se han visto envueltos en una escena violenta, en la que los okupas les han lanzado diferentes objetos. Explica, además, que ha sido un momento complicado, donde confiesa que "hemos tenido miedo, yo he temido por mi compañero Diego, por mi compañero cámara".
Los okupas han amenazado a los periodistas porque no quieren que les graben el rostro, sin embargo uno de ellos sí que ha accedido a hablar, aunque sin mostrar su rostro. "Sobre las seis de la mañana yo escuché gritos, me asomé por el edificio y me encontré a personas vestidas de negro sacando a personas del edificio". Explica que "yo no entendía nada" y que pensaba que sería una discusión entre vecinos.
Cuenta que cundo baja a la segunda planta del edificio "me encuentro a los desokupas con extensibles, echando spray pimienta y los chicos llorando, mujeres tiradas en el suelo, un caos, un fraude", algo que considera "inhumano". Piden que "cuando nos vayan a sacar nos den una orden judicial y nos vamos sin ningún problema, que se queden con el edificio pero que no hagan eso, ha sido inhumano", relata.
En cuanto a la agresión al vigilante, nos da su versión: "cuando el muchacho no le quiso abrir la puerta, forzó la puerta y se cortó la mano, yo ví ese momento".