Coronavirus
España se enfrenta a la vacunación del coronavirus y a tercera ola con muchos menos sanitarios de los que necesita. En atención primaria en España, por ejemplo, 15.000 enfermeros menos que la media europea. Y a esto se le suma la presión a la que están sometidos.
Entran cada día al hospital con el único objetivo de salvar vidas, y en ocasiones sin los medios necesario y aguantando ola, tras ola y muchos están al límite.
Víctor Aparicio, enfermero, señala que "dentro del sistema sanitario hemos normalizado que los profesionales estén medicados, antidepresivos con ansiolíticos para dormir porque el estrés les ha superado". Y les sigue superando la falta de conciencia de muchos que se reúnen en aglomeraciones, por ejemplo, mientras ellos conviven con esto cada día dejándose la piel, y eso quien no tiene que soportar las secuelas de haber sufrido el covid, una de ellas la depresión.
Victoria, enfermera, señala que "estando de baja me siento fatal porque no puedo ayudar a mis compañeros", que están desbordados de trabajo. Después de 15 años trabajando en el hospital Gregorio Marañon, de Madrid, lleva meses baja por culpa del coronavirus, sufre secuelas desde hace 10 meses.
"Hay días que pasas mucho miedo, lloras mucho y no sabes a qué se debe", señala Victoria, y le da miedo simplemente la idea de volver.
El 28% de los sanitarios han padecido depresión después de la primera ola del coronavirus, según el Instituto de Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM).
Isabel García, portavoz del sindicato de enfermería de Madrid, señala que "creemos que es una profesión que cada vez se machaca más". Algunos, incluso, han cambiado de especialidad.