Valdecañas
Los propietarios de esta localidad luchan para que decenas de familia no pierdan los puestos de trabajo. Valdecañas, además, es el motor económico de varios pueblos de alrededor.
Los vecinos de Valdecañas, en Cáceres, siguen en vilo. El Supremo insiste en que hay que demoler la urbanización pero ellos han recurrido esa decisión, un equipo de Antena 3 Noticias ha podido acceder a esta exclusiva "Marbella" extremeña.
"Los vecinos de la Isla de Valdecañas no nos queremos ir, nos queremos quedar", explica Pepe Pisa, propietario de una vivienda. Las casas de los vecinos de esta Isla se empezaron a construir con el beneplácito de la Junta de Extremadura.
"Casi todos los árboles de aquí los hemos plantado nosotros, antes de esto había una escombrera. Somos muchas familias las que trabajamos aquí y ese es el objetivo, salvar todos estos puestos de trabajo", nos cuenta Vicente Salgado, director del Hotel Golf Valdecañas.
Valdecañas, el motor económico de los pueblos cercanos
El hotel está completo pero además, Valdecañas, es el motor económico de los pueblos cercanos, El Gordo y Berrocalejo: "En El Gordo puede haber 20 familias pero en el global de la comarca unas 150".
Los propietarios se aferran a una última esperanza, a que Valdecañas no hubiera sido declarada formalmente "espacio protegido": "Esto no es una zona de especial protección de aves", dice Pisa. Los propietarios creen que sus casas todavía pueden librarse de la piqueta.