En Girona
El Vaticano ha apartado del sacerdocio a Tomás Pons. El cura
acusado por haber presuntamente abusado sexualmente de menores no podrá volver
a ejercer el sacerdocio.
Además de la prohibición de ejercer la Santa Sede incluye en
su castigo al párroco el veto para residir en la localidad donde se habrían cometido
los abusos. Y la negativa a realizar actividades que incluyan tratos con
menores de edad.
A través de esta dura penitencia el Papa Francisco quiere
reafirmar su condena ante los abusos en la iglesia. En la misma dirección han
ido las declaraciones del arzobispo de Gerona, que ha sido quien le ha comunicado
su penitencia a este párroco de 91 años.
La investigación que acaba de concluir comenzó el pasado 4
de febrero. La comisión diocesana del Obispado de Girona ha consistido en
recoger el testimonio de algunas de las víctimas y del párroco denunciado, así
como de personas relacionadas con los hechos, como exalcaldes, en total una
quincena.