EN SEVILLA
Muchos vecinos de Coria del Río, en Sevilla, conviven con un olor que califican de "insoportable" y que les provoca dolores de cabeza, mareos y taquicardia.
El alcalde, Modesto González, cree que los gases proceden de un posible vertido ilegal pero no saben quiénes son los responsables ni dónde se ha producido. Dice que el Ayuntamiento ya ha hecho todo lo que podía y pide a la Junta de Andalucía que intervenga.
En los más pequeños, los efectos son más agudos: tosen mucho y por eso no pueden dormir. Los afectados presentarán ante la Fiscalía todos los informes médicos con los síntomas que padecen.
Los informes de agua y medioambiente del Ayuntamiento apuntan a que hay sustancias propias de tintorías y lavanderías pero "no parece que procedan de las empresas de la zona", dice el alcalde.