EN MARBELLA
En los juzgados de Málaga la madre de una niña de 13 años dijo al juez que tenía que corregir a su hija y por eso le dio varios pellizcos y un puñetazo. Al padre también lo hirió por interponerse. Pero el magistrado tiene más información, por eso le condena.
No podrá acercarse a su hija en un año. Para el abogado de la mujer es una venganza porque el matrimonio está en pleno proceso de separación y petición de custodia.
No es la primera vez que se condena a unos padres por una bofetada. Ya pasó con un matrimonio en Jaén. La madre golpeó a su hijo por no hacer los deberes otro caso en Valencia la madre golpeaba reiteradamente a su hija de nueve años y en el adverbio está la clave, dicen los expertos. Cuando es reiteradamente algo habitual es cuando se considera maltrato en el ámbito doméstico, como en este último caso de Marbella. Los jueces valoran caso por caso y aplican la e ley en su contexto.