Drogas
Los vecinos de un barrio de Barcelona se encuentran en pie de guerra contra un establecimiento de cannabis que abrirá próximamente en su barrio. Afirman que se trata de un "mal ejemplo para la juventud" y que "traerá problemas".
Sin embargo, el local cumple toda la normativa exigida para estos casos: Guarda la distancia mínima con cualquier centro escolar, que está establecido en 100 metros, cuenta con un buen sistema de ventilación, doble entrada y cumplen con el plan urbanístico. Sin embargo, los vecinos no se quedan tranquilos y por todo el barrio ya cuelgan pancartas en repulsa de este tipo de locales.
Según la legislación vigente, resulta bastante fácil abrir un local de este tipo y un buen ejemplo de ello es Barcelona dónde ya hay abiertos en torno a 200 establecimientos.