LOS IMPLICADOS SE NIEGAN A DECLARAR
La Policía tiene confirmado que tanto el cuidador de Concha, la viuda acusada de matar a su cuarto marido, y cómplice, y la víctima, tienen antecedentes por tráfico de drogas e investiga si pudiera tratarse de un ajuste de cuentas.
Ante el juez, los dos vestían pijama porque la ropa que llevaban cuando presuntamente cometieron el crimen se está investigando. La mujer que compartió calabozos con ellos les escuchó hablar durante horas.
Para esclarecer el crimen y ante la negativa a declarar de los detenidos, serán clave para la investigación los testimonios de sus círculos más cercanos. Unos hablan de intereses económicos y otros de matrimonio de conveniencia.