nuevas dificultades en el rescate de julen
Llegar hasta Julen antes del lunes es el reto que se han marcado los técnicos que participan en el rescate del niño de 2 años que cayó el pasado domingo a un pozo en Totalán (Málaga), pese a que el hallazgo de un macizo rocoso de pizarra en las excavaciones complica de nuevo los trabajos.
El responsable del operativo, Ángel García, delegado del Colegio de Ingenieros de Caminos de Málaga, ha precisado que, después del túnel vertical, el equipo de rescate minero desplazado desde Asturias deberá hacer una galería horizontal que conecte con el pozo, para lo que ya se preparan otros equipos.
En condiciones "muy favorables", la ejecución del túnel vertical puede conllevar entre doce y quince horas según el tipo de terreno, aunque García ha advertido de que es probable que se tope con roca, lo que ralentizaría el trabajo y obligaría a cambiar las cabezas de perforación.
La nueva perforadora -llegada desde unas obras en la carretera M-40 de Madrid- tiene más longitud y permite que no se tenga que rebajar la montaña treinta metros, como inicialmente se había planteado. Un geolocalizador ha permitido determinar que el pozo donde cayó Julen tiene una desviación entre la boca y el fondo, lo que sirve para afinar los cálculos respecto de las actuaciones a acometer.
En la zona trabajan doce máquinas como retroexcavadoras, entre las que están las de mayor potencia del mercado.