Igor el Ruso
Los magistrados consideran que en el proceso quedó acreditado el deseo de causar un sufrimiento mayor a las víctimas, tanto porque se descargaron totalmente las armas sobre ellas como por la localización de las balas.
El Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) ha confirmado la condena a prisión permanente revisable y a 50 años de prisión dictada por la Audiencia de Teruel contra el criminal serbio Norbert Feher, Igor el Ruso, por los asesinatos de dos guardias civiles y un ganadero en un masico (casa de campo) en el municipio turolense de Andorra.
En su sentencia, hecha pública este viernes, los magistrados de la Sala Civil y Penal del TSJA desestiman el recurso de apelación presentado por el abogado de Igor el Ruso contra la resolución de la Audiencia Provincial de Teruel y la confirman en todos sus términos.
El tribunal no comparte el argumento de que no existe prueba de cargo, directa ni indirecta, porque los agentes de la Guardia Civil estaban armados y pudieron oponer resistencia eficaz al ataque ya que superaban en número a Feher. Además los magistrados entienden que la alevosía está presente en los tres asesinatos dada la "inexistencia de probabilidades de defensa" que tenían estas personas, al haber sido atacadas por la espalda y desde su escondida posición, según informa el TSJA en nota de prensa.
Ensañamiento
Respecto al motivo de ensañamiento, consideran también que en el proceso quedó acreditado el deseo de causar un sufrimiento mayor a las víctimas, tanto porque se descargaron totalmente las armas sobre las víctimas como por la localización de algunos impactos de bala. El Tribunal concluye que "se ha infligido en el presente caso un dolor singular a las víctimas, utilizando una metodología homicida cruel".
El tribunal entiende además que ha quedado acreditado que "el acusado no albergaba ninguna duda sobre la condición de agentes de la Guardia Civil de sus víctimas cuando sin darles tiempo a desenfundar sus armas, les dispara oculto desde detrás del vehículo, y luego los remata", por lo que desestima también que el acusado pudiera haber actuado en legítima defensa como explica su abogado en el recurso.
Otras penas
El criminal serbio, además, tiene pendiente una cadena perpetua en Italia por otros dos asesinatos, y también pesa sobre él otra pena de 21 años de cárcel por dos intentos de homicidio cometidos en España, pena que le fue impuesta en firme el año pasado