LAS PROFESIONES MÁS DURAS EN VERANO
La ola de calor que vive España estos días se está haciendo especialmente dura para las personas uqe se ven obligadas a trabajar bajo el sol. En muchos puntos de la Península, a los grados del termómetro se le suma la humedad, lo que eleva la sensación térmica cuatro o cinco grados.
Muchos obreros y jardineros de las grandes ciudades lo están pasando especialmente mal, y la muerte de un trabajador mientras asfaltaba una carretera en Morón de la Frontera les recuerda las precauciones que deben tomar.
Lo mismo les ocurre a los repartidores en las zonas turísticas. Sus trucos son llevar la cabeza cubierta y beber mucha agua.
En el interior, los pastores también pasan la jornada al aire libre. Intentan sacar a las ovejas a las horas de menos calor, con la cabeza cubierta y una botella de agua en la mano.