POR UN APARATOSO ACCIDENTE EN EL MAR
Un total de 40 detenidos y 5.000 kilos de hachís intervenidos es el resultado de una operación desarrollada en Cádiz en la que se ha desarticulado una red que introducía esta droga desde Marruecos en dobles fondos de barcos y durante la que una de las embarcaciones sufrió un aparatoso incendio en el mar.
En la operación, desarrollada entre Guardia Civil, Policía Nacional y Agencia Tributaria, se han efectuado catorce registros en domicilios, una nave industrial y un establecimiento hotelero en las localidades gaditanas de San Fernando, Chiclana, Jerez, El Puerto de Santa María y San Roque, además de en La Carlota (Córdoba), según una nota del Ministerio del Interior.
La operación se inició tras el intercambio de información entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que constató la existencia de una organización asentada en la Bahía de Cádiz que introducía hachís desde Marruecos en dobles fondos de embarcaciones de recreo con las que simulaban ir de pesca a plena luz del día.
Los agentes establecieron un dispositivo de seguimiento de los sospechosos. Así, el 6 de junio interceptaron una embarcación con 1.085 kilos de hachís; el 30 de junio otra con 900 kilos de la droga y el 21 de julio otro barco con 41 fardos de hachís con un peso de 1.200 kilos, en tres operaciones en las que los tripulantes de las naves fueron detenidos.
El 26 de agosto los agentes constataron que la organización preparaba otro "golpe" con dos embarcaciones de recreo y, durante la vigilancia comprobaron que se pasaban unos bultos desde una a otra.
Cuando los agentes iban a abordarles, uno de los tripulantes disparó una bengala sobre uno de los guardias civiles, tras lo que se produjo una explosión a bordo que provocó el incendio de la nave los narcotraficantes, lo que hizo que salieran despedidos al mar, según la nota.
Mientras un agente trataba de extinguir el fuego, otros rescataron a los narcotraficantes del agua, algunos de ellos heridos (uno que tuvo que ser trasladado al hospital con graves quemaduras en las piernas).
Los agentes también rescataron varios fardos de hachís que habían caído al agua y, con la ayuda de funcionarios especializados en actividades subacuáticas, recuperaron la embarcación incendiada, que había quedado semihundida, y en la que hallaron otros 1.270 kilos de hachís.
Fruto de las interceptaciones y de las detenciones llevadas a cabo en cada una de ellas, se realizó una redada en tierra que llevó a la detención de casi una treintena de personas, entre ellas el jefe de la red, un ciudadano marroquí que desde hacía muchos años reside en Chiclana de la Frontera, donde regenta varios locales de copas, según fuentes de la investigación.
En estos registros fueron intervenidos 15.000 euros en metálico, turismos, una pistola detonadora, así como cocaína y hachís dispuestos en dosis para su venta. La titular del Juzgado de Instrucción número uno de Chiclana de la Frontera (Cádiz), encargada de la investigación, ha decretado ya el ingreso en prisión para 27 de los detenidos.