NO HAY HERIDOS
Las cinco personas que se encontraban en el interior de una farmacia de Torrox, en Málaga, apenas han superado aún el susto que se han llevado.
El conductor, un residente en la zona de origen alemán, no supo explicar qué le había sucedido para perder el control de su vehículo.
Los empleados del establecimiento aseguran que el momento en que el coche impactó contra el escaparate fue como la explosión de una bomba. En la farmacia había tres empleados y dos clientes. Todos están ilesos.