Sevilla
Varios testigos ayudaron al conductor a librarse del atacante. El agresor es un ciudadano ruso con pasaporte alemán. Se montó en su taxi mientras esperaba a un cliente en la puerta de un céntrico hotel de Sevilla.
Eran las siete y cuarto de la mañana. Hugo esperaba a un cliente en la puerta de un céntrico hotel de Sevilla. En ese momento se montó en su taxi otra persona, "un señor vestido de negro, rubio". El taxista le pide que se baje, le explica que ya está ocupado con otro servicio. El inesperado pasajero se niega y le insiste al conductor que lo lleve a su destino; hablaba en otro idioma. Entonces, "le pido a los botones del hotel que me ayuden, que este hombre no se quiere salir".
El conductor recuerda que se apeó del coche mientras que el pasajero hacia lo mismo. Ya frente a frente el agresor le escupió. Hugo se limpiaba "no me da tiempo a quitarme la saliva que ya me dio el primer golpe en el ojo y un segundo con el puño cerrado en la cara, entonces me caigo al suelo y ya no me acuerdo bien".
Intenta reponerse, y ve como el hombre está pisando su teléfono móvil, "después se vuelve contra mí y empieza a patearme y a pisarme la cabeza, coge mi móvil como arma y empieza a empotrármelo". Muchos de los detalles de su agresión se lo han contado los testigos, porque a él le cuesta recordar lo ocurrido.
Precisamente los testigos, los botones del hotel, intentan parar la paliza. Pero se zafa de ellos y continúa golpeando al conductor mientras este aún permanecía tirado en el suelo. También acudieron en su ayuda operarios de una obra cercana, pero entre todos no conseguían inmovilizar al atacante.
La víctima gritó: "ayudadme por favor que me va a matar" e insiste "es que ese hombre me iba a matar". Como pudo se protegió con sus manos, que también están muy magulladas, y logró desplazarse hasta el hotel donde lo asisten limpiándole la sangre de la cara. Desde allí llamó a un compañero taxista para contarle lo sucedido y fue entonces cuando le comunicaron que "no te preocupes que lo han cogido". Agentes de la Policía Local de Sevilla lo habían detenido en una plaza cercana.
El taxista fue trasladado al hospital donde permaneció 24 horas ingresado para observación ya que, según relata, "tengo un traumatismo craneoencefálico". Las heridas de Hugo son evidentes días después, tiene varios puntos de sutura en una ceja y hematomas por toda la cabeza, sobre todo en el ojo izquierdo,
Al poner la denuncia la policía le comunicó que su agresor es de origen ruso con pasaporte alemán. Según le cuentan, el detenido preguntó si el motivo del arresto había sido esta paliza u otra anterior, "al parecer esta persona ya había pegado a alguien sobre las 2 de la mañana".
"La policía sabe que este hombre es peligroso". El detenido ya ha pasado a disposición judicial, mientras el conductor se recupera de sus heridas.