VALENCIA | HAN SIDO DETENIDOS
Eduardo escucha por la emisora de su taxi dos alertas sobre dos atracos a compañeros. A punto de terminar su jornada, dos hombres le paran y al subirse al vehículo, el joven valenciano de 27 años descubre que son los atracadores. Los identifica por la descripción que había oído.
Dentro del taxi sólo hay silencio y miedo. Eduardo sólo piensa en llegar hasta donde sabe que están los agentes. Lo consigue y sus 'clientes' son detenidos como presuntos autores de robos con violencia e intimidación.
Ahora, Eduardo se pregunta cómo tuvo la suficiente sangre fría para actuar de esa forma. Hay quien le llama héroe, pero Eduardo dice que sólo es un modesto profesional del taxi.