Desalojo en Eibar
El alcalde de Eibar, Miguel de los Toyos, ha ordenado el derribo "inmediato" de tres edificios después de que parte de este último portal se viniera abajo este pasado miércoles. No hubo que lamentar daños personales, puesto que el edificio se encontraba vacío.
A principios del mes de octubre, vecinos del número 15 de la calle Arragüeta pusieron en conocimiento del Ayuntamiento la presencia de grietas en las paredes del edificio, motivo por el cual la arquitecta municipal se personó en el mismo a fin de comprobar este extremo. El Consistorio ha señalado que, "preocupados por este problema" y también por cómo podrían afectar a este inmueble los próximos derribos de los números 11 y 13 de esta calle, cuyo expediente de ruina fue iniciado por el Ayuntamiento hace unas semanas, desde el Area de Urbanismo del Ayuntamiento "se ha venido haciendo un seguimiento muy cercano del estado del inmueble, a fin de garantizar la seguridad de sus vecinos".
En la mañana del pasado martes, vecinos del número 15 informaron al Ayuntamiento de que las grietas existentes "habían aumentado considerablemente de tamaño en pocos días". Por tal motivo, la arquitecta municipal se personó inmediatamente en el inmueble a fin de estudiar nuevamente este problema. Durante la inspección, detectó que uno de los muros del edificio y que da al interior de la parcela se había desplomado parcialmente, según los vecinos la noche anterior, lo que "habría agudizado el problema de fisuras".
Por ello, la arquitecta municipal ordenó "de manera inmediata" el desalojo del edificio por entender que existía riesgo cierto de derrumbe. Ante esta situación, el Ayuntamiento, coordinando todos los departamentos municipales implicados, realojó a los 18 vecinos del citado inmueble.En la mañana de este pasado miércoles, ante la evidencia de que el deterioro del edificio era cada vez mayor, técnicos del Ayuntamiento acudieron al inmueble a comprobar su estado a fin de adoptar las medidas correspondientes y, alrededor de las 13.30 horas, parte del edificio se vino abajo. No hubo que lamentar daños personales, puesto que el edificio se encontraba vacío.
El Ayuntamiento ha señalado que se desconocen, por el momento, las causas exactas por las que parte del edificio se derrumbó, "si bien su antigüedad, unido a la falta de un correcto mantenimiento y conservación por parte de la propiedad, se barajan como las más probables".