Villa de Pitanxo
Al parecer, los marineros pidieron a gritos un arriado de cables que podría haber evitado el hundimiento.
El testimonio de uno de los supervivientes del Villa de Pitanxo se centra en que los marineros pidieron a gritos al patrón un arriado de cables que podría haber evitado el naufragio pudiendo estabilizar el buque, pero explica que el patrón no dijo nada a la tripulación para que se pusiese el equipo de supervivencia ni dio la señal de abandono del buque. El naufragio del pesquero gallego Villa de Pitanxo tuvo lugar el pasado 15 de febrero a 450 kilómetros al este de Terranova (Canadá).
Según adelanta 'La Voz de Galicia', Juan Padín, el patrón, no atendió las advertencias que los marineros le hacían desde el parque de pesca para que soltase la red, algo que hubiera permitido corregir la escora y evitar el naufragio que acabó con la vida de 21 personas.
En un comunicado, Samuel ha indicado que "por el bien de que su testimonio llegue a buen término en sede judicial" todavía no ha hablado con las familias de las víctimas, "pese a ser él el primero" en querer hacerlo. Además, ha explicado que "no quiero que gire sobre mi persona esta tragedia tan grande por respeto a mis compañeros y para que sean las autoridades las que definan las responsabilidades" insiste. Por todo esto, ha pedido "comprensión" a las personas que esperan a saber su versión.
Los familiares agradecen la 'valentía'
Ante todo esto, los familiares de los 21 fallecidos en el naufragio han agradecido a Samuel "su valentía" y que no haya caído en "la mentira". Añaden que "ahora queda un proceso judicial por delante" y dicen que "personas como él contribuyen a que este mundo sea más justo. Su valentía, a pesar de todas las presiones, es ejemplar", reivindican.
Este naufragio acabó con la vida de 21 de los 24 marineros, nueve de los cuales fueron rescatados sin vida y el resto todavía están desaparecidos.