Madrid
La mascarilla es obligatoria aunque todavía hay quien no se da por aludido. En las últimas horas se ha batido el récord de fallecidos por coronavirus y la sociedad lucha en su conjunto por frenar la curva de contagios de COVID-19. Por delante tenemos el reto de celebrar la Navidad de 2020 sin paralizar la economía y sin que llegue una tercera ola de contagiosos coronavirus pero seguimos viendo a imprudentes y negacionistas.
Hablando por el móvil sin la mascarilla
La escena ocurría en un vagón del tren que va hasta la terminal satélite del aeropuerto de Madrid-Barajas. Lo cuenta la usuaria de Twitter Elisa Garabatos que también va en el vagón. Le llama la atención que un chico va hablando por el móvil con la mascarilla en el cuello. Un pasajero le pide que se la ponga correctamente.
"No os vais a creer lo que me acaba de pasar pero allá voy" comienza su hilo de Twitter que narra lo que va ocurriendo "estoy en el aeropuerto e iba en el tren que va a la satélite. Estábamos un chico y yo en el vagón y entra otro chico hablando por teléfono y con la mascarilla en el cuello".
Sigue explicando lo sucedido en el tren: "el chico que estaba en el vagón antes que él le dice que por favor se ponga la mascarilla. El Zagal le mira y pasa ampliamente de su cara y sigue riéndose con su conversación telefónica". Ante la respuesta del chico que no tiene intención de cumplir con la ley, ni parece preocuparle el coronavirus, la chica toma parte para pedirle también que sea responsable: "yo, para hacer más presión, le digo lo mismo, que por favor se ponga la mascarilla". El ruego no parece tener éxito.
Dice la usuario cada vez más asombrada que "el chaval se descojona en nuestra cara y le dice el otro chico: ¿no te la vas a poner?" a lo que el chaval le responde con chulería. "No, qué vas a hacer". Y es entonces cuando llega la sorpresa....
Tras otro intento, el hombre "saca una placa y le dice: Policía, documentación y motivo de viaje". La usuaria termina con un "karma, bitches"
Termina la chica relatando que la cara del chico cambia al ver la placa. Así lo cuenta la usuaria: "me descojono porque cuando vio quién era le dice ¿Es obligatoria aquí? No lo sabía. Y tenía delante un cartel enorme de AENA de mascarilla obligatoria".
La tuitera concluye con un "¡Cuanta gloria, amigos!".