Robo
La Policía analiza las cámaras de seguridad del establecimiento para tratar de identificar a los miembros de la banda, autores de un robo minucioso.
Eran las 06:00 horas de la mañana cuando se pusieron manos a la obra en la tienda de bicicletas Sanchis situada en el polígono del Braçal del Roncador de la localidad valenciana de Xàtiva. Seis personas encapuchadas abrieron un butrón en una pared de hormigón con una maza de medio metro de altura en una de las paredes laterales de la nave como primer paso para cometer el robo.
La banda estaba completamente organizada, tal y como explica Salvador Sanchis, propietario del negocio de bicicletas: "Tras romper la pared se deslizaron a través del suelo para no activar los sensores y evitar así que saltaran las alarmas".
Estuvieron cuatro horas dentro de la tienda moviéndose con sigilo mientras otros realizaban fuera labores de vigilancia. Salvador Sanchis también ha explicado que "habían robado previamente un coche y un camión y lo habían aparcado estratégicamente junto al muelle de carga de una empresa cercana para ir cargando una a una las bicicletas".
La Policía Nacional analiza ahora las cámaras de seguridad de la empresa. Los ladrones llevaban pasamontañas y guantes para perpetrar el robo. "Se llevaron las bicicletas de alta gama, la que menos cuesta está en torno a los dos mil euros. Estamos ahora haciendo inventario. Calculamos que se han llevado entre 30 y 40", ha explicado el propietario.
Un descuido hizo que sobre las 10:15 horas saltaran las alarmas. Fue entonces cuando el propietario del negocio se percató de lo sucedido y avisó a la Policía. En ese momento los ladrones abandonaron el local a toda prisa y, cuando llegaron los agentes, la tienda estaba ya vacía.
En el negocio de Xàtiva hacen este martes el inventario y la evaluación de los daños para acudir al seguro y presentar formalmente la denuncia.
Los agentes investigan y estudian con lupa este minucioso y orquestado robo a través de lo grabado por las cámaras de seguridad. Parece claro que los delincuentes habían estado previamente en la tienda y en los alrededores para ir sobre seguro. Y es que los encapuchados lo tenían todo planeado. Se calcula que estuvieron más de cuatro horas arrastrándose por el suelo y sacando una a una las bicicletas más buenas y caras con total impunidad hasta que un falso movimiento truncó a mitad este millonario robo.