Estafa
Un grupo de once personas reservaron para comer en el restaurante de Villagonzalo Pedernales, en Burgos, el día de Reyes. Como el resto de los comensales, hasta 150, tomaron un menú especial para el día de fiesta: una sopa de la casa con boletus, ensaladas y unos langostinos.
Pronto empezaron a quejarse de la calidad de los langostinos. " Para compensar, les ofrecimos otro plato u otra tanda de langostinos", dice el dueño del establecimiento, Iker Salgado, mientras bebían botellas de buen vino, hasta 3, de Ramón Bilbao.
Finalmente y a pesar de que les ofrecieron la "hoja de reclamaciones", los once fueron saliendo del restaurante dejando a deber una cuenta de 475 euros.
Gracias al teléfono que facilitaron para la reserva de la mesa en el restaurante- hotel Landilla se ha identificado al menos a uno de ellos que tiene antecedentes por hechos similares. Ahora está siendo investigado en un juzgado de Burgos por un delito de estafa.