Marruecos
Hoy la Justicia ha paralizado las repatriaciones de menores a Marruecos para evitar una vulneración de derechos fundamentales.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez ha llamado hoy al presidente de la ciudad autónoma de Ceuta, Juan Jesús Vivas, para abordar el bloqueo de la devolución de menores a Marruecos.
Sánchez ha citado al mandatario ceutí en Moncloa después de que un juzgado de la ciudad autónoma haya decidido mantener suspendidas esas devoluciones. Por su parte, el Ejecutivo central ha abalado las devoluciones de menores desde Ceuta porque se les reúne con sus familias.
Asimismo, el propio presidente de Ceuta ha incidido en la necesidad de "dar una solución" a un problema que se torna "insostenible".
Paralizadas las devoluciones
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Ceuta ha paralizado este martes las repatriaciones de menores a Marruecos pese al criterio de los servicios jurídicos del Gobierno que defienden que Interior actuó conforme a la normativa.
La Justicia advierte que si se levanta la medida "se estaría permitiendo la repatriación de los mismos, por lo que sería absolutamente ineficaz al haberse ejecutado una decisión administrativa vulneradora de un derecho fundamental".
Marlaska asegura no sentirse desautorizado
El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado por su parte este martes por la noche que la decisión de la jueza "no le desautoriza en absoluto". Marlaska ha hablado desde la base aérea de Torrejón de Ardoz, poco después de que aterrizase uno de los aviones que hoy han llegado a España procedentes de Afganistán (previa escala en Dubái).
El responsable de Interior ha dicho que su cartera no tiene competencia sobre la tutela de los menores no acompañados ni sobre su retorno asistido y que, por lo tanto, es "imposible sentirse desautorizado".
La crisis migratoria dispara las solicitudes de asilo
Mientras, los marroquíes en situación irregular atrapados en las ciudades autónomas tras la pandemia del coronavirus recurren a la petición de asilo para establecer su residencia en España de manera legal.
El problema es que hay un gran volumen de demandas que se encuentran a la espera de ser tramitadas, lo que a su vez provoca una demora en las resoluciones. Dichas solicitudes deben admitirse a trámite en menos de un mes. A partir de ese momento se considera su admisión por silencio administrativo con lo que cualquier persona que haya gestionado la petición puede moverse por todo el territorio español.