UNA CADENA DE ORO DE 3000
En una joyería de Tenerife pidió que le mostraran una cadena de oro valorada en más de 3.00 euros y, sin más, se la llevó.
El problema es que dejó olvidado su DNI, que los empleados exigen cada vez que un cliente se interesa por una joya de gran valor.
El ladrón salió con la cadena de oro en la mano, pero se dejó el carnet en el mostrador. El ladrón está indentificado pero no detenido.