Caballito de mar
En las costas de las Rías Baixas, en Galicia, pueden encontrarse dos tipos de caballitos de mar que el CSIC está estudiando.
Es bien sabido que nuestros océanos y mares cuentan con una gran riqueza medioambiental. Pero el océano Atlántico se ha alzado como refugio para las especies menos frecuentes de caballitos de mar. Concretamente, la zona de las Rías Baixas, en el sur de la comunidad gallega, donde el CSIC estudio a este animal.
Así pues, en estas frías aguas podemos encontrar dos tipos de este animal acuático: el 'Hippocampus hippocampus' -que es el caballito de mar común- y el 'Hippocampus guttulatus' -más conocido como caballito de mar europeo narizón, por su hocico más alargado-.
Unos peces que viven en unos ecosistemas muy concretos y su presencia está asociada a la salud y distribución de comunidades vegetales marinas. Debido a eso, son muy difíciles de encontrar y no abundan tanto como otras especies. Tanto es así que, en tres años de trabajo del CSIC, solo se pudo localizar media docena de ejemplares de la especie común.
Con esos estudios, desde el CSIC también han constatado que existen colonias de caballitos de mar en las rías de Arousa, Pontevedra y Vigo.
La importancia de proteger la especie
El caballito de mar es una especie que se encuentra en regresión, sin llegar a estar en peligro de extinción. De ahí la importancia de conservar y preservar las poblaciones de este animal marino. Además, se ha descubierto que en muchas zonas donde antes había ejemplares ahora han desaparecido.
Pero no solo en las costas gallegas podemos encontrar estos singulares peces. Los caballitos de mar están presentes en muchas costas europeas, distribuyéndose desde los Países Bajos hasta el Mar Negro. Pueden habitar en pequeñas áreas de zonas costeras, lagunas y estuarios.