DENUNCIAN ESTE TIPO DE SITUACIONES
Marta, una trabajadora del 112, solo tenía una ambulancia disponible cuando recibió cuatro llamadas pidiendo ayuda. "Mi abuela se ha caído, está sangrando", "Mi hijo está sufriendo un ataque de epilepsia", "Mi marido está con lumbalgia" y "Tengo a mi abuelo con fiebre, desorientado y agitado", estas son las cuatro peticiones que recibió.
Son situaciones límite a las que se enfrentan muchos sanitarios. Los trabajadores que están al otro lado del teléfono son los primeros en recibir la información e incluso, a veces, esa primera llamada es trascendental en el futuro. Denuncian que los recortes les obligan a trabajar en una situación precaria sin los medios necesarios