PROTAGONISTAS DE LAS HORAS DECISIVAS
Unas 300 personas han compuesto el operativo de rescate de Julen, el pequeño de dos años que el pasado 13 de enero cayó a un pozo en Totalán, Málaga: Guardia Civil, miembros de protección Civil, voluntarios, mineros y psicólogos.
Son mineros de élite, entrenados para este tipo de rescates. Se trata de gente muy experimentada y formada. El terreno tiene su riesgo, pero ellos son profesionales que saben cómo actuar en cada momento.
Su trabajo era el más delicado de todo el rescate, los últimos metros hasta llegar al pequeño Julen. Con las manos se han enfrentado a las dificultades del terreno, al angosto y oscuro túnel que ellos mismos han ido abriendo a mano con muy poco oxígeno.
Son labores muy tediosas en las que el avance en muy lento porque lo que tiene que primar en cada momento es la seguridad del rescatador.
Seguros pero sin cesar en su trabajo no han querido perder ni un solo segundo y han ido ganando paso a la tierra con su propio esfuerzo. Un trabajo realizado con mucha presión con todas las miradas puestas en ellos en las que han sido las últimas horas del rescate.