Renfe
Los pasajeros del tren se quejaron de los gritos, los golpes y el escándalo de los niños. Los menores iban a un curso de inglés a León, pero les expulsaron por mal comportamiento.
Los menores de 10 y 11 años se dirigían desde Barcelona hasta León para participar en un curso de inglés. Pero un interventor les obligó a bajarse en la estación de Palencia. Antonio Carmona, portavoz de RENFE, explica "que se tuvieron quejas de los pasajeros por gritos, golpes y escándalo".
Aunque los 22 niños estaban acompañados por dos monitores se tomó la decisión de obligarles a abandonar el tren. Según el portavoz de Renfe "era la mejor solución. Combinar el viaje de los niños y el resto de pasajeros. Y esos niños se bajaron en Palencia".
El grupo escolar, con los monitores, se bajaron del tren. Pero los padres de los niños se preguntan qué ocurrió para que expulsaran a los menores. Uno de ellos pide explicaciones: "¿Qué motivos tenía un interventor para realmente echar a a los niños del tren?".
Los pequeños continuaron su viaje hasta León en autobús. Y, según Renfe, siempre estuvieron acompañados y vigilados por los monitores, policía y personal de Renfe.
Renfe investiga los protocolos de actuación ante este tipo de situaciones.