Narcotráfico
El narcotráfico es una de las actividades económicas que más dinero mueve alrededor del mundo pese a ser ilegal. Un mercado que no ha parado de crecer en los últimos años y que ha obligado a políticos de todos los países de Europa a plantearse medidas para combatirlo.
'Todo, de todo y en todas partes', esta es la conclusión del Informe Europeo sobre Drogas de 2024 elaborado por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA) de la situación actual del narcotráfico y el consumo de estas sustancias en Europa.
Uno de los mensajes clave que trasmite este informe es que las consecuencias del consumo de drogas ilegales se manifiesta en casi todos los aspectos de nuestra sociedad. Casi cualquier sustancia con propiedades psicoactivas puede considerarse una droga. Esto implica que todas las personas, ya sea de manera directa o indirecta, pueden sufrir el impacto del consumo de estas sustancias y de los problemas que generan.
Según estos datos, al menos 22 millones de personas en la UE han consumido cannabis, cuatro millones cocaína y casi tres millones MDMA durante el último año. Además, el número de consumidores de cocaína ha pasado de 14,4 millones en 2022 a 15,4 millones, y la cifra de MDMA -también llamado éxtasis- ha saltado de 10,6 millones a 12,3 millones.
En los doce meses del año 2023, la Guardia Civil incautó dos toneladas y media de cocaína y una de hachís en el aeropuerto Madrid-Barajas, un 125% más que las cantidades interceptadas por el Instituto Armado en 2022.
Este aumento del consumo y del narcotráfico se traduce en un incremento de la inseguridad en nuestras calles. En España, el caso más reciente es el del pasado mes de febrero, cuando dos guardias civiles murieron al ser arrollados por una narcolancha en Barbate. Fuera de nuestras fronteras la situación no mejora. La princesa Amalia de los Países Bajos ha sido objetivo de la 'Mocro Maffía' y se ha tenido que refugiar en España.
Para entender en qué punto nos encontramos, es fundamental saber de dónde venimos. En los años 70, el narcotráfico europeo estaba gobernado por la mafia francesa y marsellesa.
Durante esos años, Europa se convirtió poco a poco en un importante mercado para la heroína, especialmente a través de rutas que llegaban desde Asia, en particular desde Afganistán. La llegada de la heroína tuvo un impacto profundo en varias ciudades europeas, que comenzaron a enfrentar problemas de adicción y crimen asociado.
Durante los años 80, el narcotráfico en Europa se diversificó con la introducción de la cocaína, en gran parte gracias a los cárteles colombianos. Durante esas décadas, Galicia se convirtió en un punto estratégico de entrada de la droga en Europa.
Ahora, la costa andaluza, especialmente en provincias como Málaga y Cádiz, ha visto un aumento en el tráfico de hachís y otras sustancias. La proximidad a Marruecos facilita el contrabando de hachís, que sigue siendo una de las drogas más consumidas en España.
Nota: este gráfico presenta las tendencias indexadas que reflejan cambios relativos en las incautaciones de drogas durante un período de 10 años, pero no dan ninguna indicación de las cantidades reales.
Europa se encuentra en un mercado cada vez más emergente. Hemos pasado de ser el destino final de las drogas como, por ejemplo, la cocaína que procedía de Colombia, a ser un lugar de tránsito y procesamiento.
Andros Lozano, periodista de 'El Mundo' y autor de 'Costo', explica que hace unos años, los traficantes de hachís solo se dedicaban a este tipo de droga. Sin embargo, ahora han comenzado a traficar también con cocaína. Para ello, en vez de utilizar un solo puerto específico como el de Amberes, Valencia o Rotterdam, los traficantes utilizan varios puertos por los que pueden introducir grandes cantidades utilizando diferentesrutas de entrada.
Además, nos encontramos con un mercado en constante cambio: ya no se trata de un único cartel controlando todo el mercado, sino que varios operan en la misma zona y al mismo nivel.
"Galicia sigue siendo una de las principales vías de entrada de la cocaína, los puertos de Valencia,Barcelona, Algeciras. Muchísima cantidad de la cocaína que se consume en Europa entra por esos puertos españoles. Y luego está el problema añadido de que las organizaciones que se dedicaban tradicionalmente al hachís han dado el salto a la cocaína y a su vez, países en los que antes los cárteles colombianos no confiaban como Mauritania, Senegal, Marruecos también son puntos que reciben la mercancía y desde ahí se le da trasladado a Europa", analiza el periodista.
Los grandes clanes del pasado que "disfrutaban de todo, de gente para trabajar, de lanchas, de coches robados..." han evolucionado dando lugar a una especie de "cooperativas del narco". "Es una industria profesionalizada, estructurada y que va fluyendo en función de la presión policial y judicial que se va haciendo en determinados lugar. Ahora lo que hay es como una especie de cooperativa del narco, vemos que hay una organización de Sevilla que se dedicaba a suministrar combustible a las lanchas, otra que pone las 'guarderías' o naves donde guardar la mercancía hasta que sus clientes se la llevan, otros que ponen los coches robados y otros que ponen las lanchas. Ya no hay, o por lo menos se piensa, ningún clan que tenga ese poder de antes", dice Lozano para añadir: "El negocio sigue fluyendo lo que pasa es que ya no pasa por una sola mano sino que pasa por muchas más".
El informe del Departamento de Seguridad Nacional de 2023 destaca la alarmante evolución del tráfico de drogas en España, evidenciada por el creciente número de procedimientos judiciales por este delito. En 2019 se registraron 18.923 casos, cifra que ha ido en aumento anualmente: 19.996 en 2020, 20.890 en 2021 y 21.740 en 2022, lo que representa un incremento del 4,07% con respecto al año anterior.
El informe también subraya que la costa sur de la Península Ibérica, particularmente la zona del Estrecho de Gibraltar, es el área marítima más afectada por el narcotráfico, donde las narcolanchas se han vuelto cada vez más frecuentes. Este fenómeno ha generado preocupaciones significativas sobre la seguridad en la región.
Además, España se ha consolidado como el principal productor de cannabis en la Unión Europea. Los cultivos de marihuana, especialmente en modalidad 'indoor', suelen estar ligados al tráfico de otras drogas, como el hachís, cuyo destino final es el resto de Europa.
En 2023, las fuerzas de seguridad y la Vigilancia Aduanera incautaron un total de 43.061 kilos de drogas. En el caso del hachís, las aprehensiones fueron de 357.510 kilos, lo que representa un aumento del 11% en comparación con el año anterior.
Por último, el informe alerta sobre el auge del mercado de nuevas sustancias psicoactivas, con la identificación de cerca de 50 nuevas drogas sintéticas cada año, diseñadas en laboratorios para eludir las regulaciones internacionales.
"No hay ningún lugar en el mundo que sea un polo de atracción tan grande como España"
La llegada masiva de drogas ha provocado un aumento desmesurado del crimen organizado y la violencia. Lozano explica que es evidente que cada vez son más violentos: "En España hay muchísimos ajustes de cuentas vinculados al narcotráfico".
Una de las mafias más peligrosas en la actualidad es la conocida como la 'Mocro Maffía' o mafia de Marruecos. Se trata de un conjunto de bandas organizadas que operan en Países Bajos y que se han asentado en algunos puntos de España. Sus principales puntos de operación en nuestro país son Málaga, Marbella, Barcelona y Melilla.
La 'Mocro Maffia' destaca por el uso de tecnología avanzada en sus comunicaciones, incluyendo teléfonos encriptados y la creación de complejas estructuras empresariales para gestionar fondos ilícitos.
Su presencia es tan clara en nuestro país que hace unos meses, el presunto cabecilla de esta banda y uno de los delincuentes más peligrosos de Países Bajos, Karim Bouyakhrichan, se fugó después de que la Audiencia Provincial de Málaga lo dejara en libertad provisional en contra del criterio del fiscal.
La Policía Nacional española le detuvo el pasado 10 de enero en Marbella (Málaga). Desde entonces, una serie de recursos y de decisiones judiciales con varios juzgados y tribunales implicados ha terminado con su puesta en libertad, su fuga y una nueva orden de detención contra él.
La mafia albanesa, a menudo asociada con el llamado 'clan de los Balcanes', es una organización criminal que ha ganado notoriedad en Europa y otras partes del mundo.
En un contexto de inestabilidad política y económica, tras la caída del régimen comunista en la década de 1990, se sembró el embrión de esta mafia cuyas actividades se han expandido significativamente a través de los Balcanes y Europa.
Generalmente se organiza en clanes familiares o grupos locales. Estos clanes operan de manera autónoma, pero pueden colaborar en actividades criminales.
Se trata de una organización muy violenta y se han convertido en una potencia en el tráfico de drogas. Está presente en las principales rutas del tráfico de droga y controlan el mercado de la cocaína en países como Reino Unido. También tiene un papel en el tráfico de personas. También están implicados en la trata de personas, explotación sexual y el tráfico de inmigrantes.
Las mafias italianas más relevantes en la actualidad son principalmente la 'Cosa Nostra', la 'Ndrangheta', y la 'Camorra'.
La 'Cosa Nostra', la mafia más conocida, tiene sus raíces en Sicilia y ha dejado una huella indeleble en la historia del crimen organizado. A pesar de los numerosos golpes que ha sufrido por parte de las autoridades, esta organización sigue operando con una estructura jerárquica fuerte.
Por otro lado, la 'Ndrangheta', originaria de Calabria, ha ido ganando poder en las últimas décadas hasta posicionarse como una de las mafias más poderosas de Italia. Ha llegado a controlar el 80% del tráfico de cocaína en Europa gracias a sus contactos con los grupos panamericanos. Especializada en el tráfico de cocaína, es responsable de una parte considerable del comercio de esta sustancia en Europa. Su capacidad de establecer conexiones internacionales la ha llevado a expandirse en América del Sur y Estados Unidos, haciendo de esta organización un jugador clave en el crimen organizado global.
En Nápoles, la 'Camorra' opera de manera diferente, compuesta por varios clanes que a menudo se enfrentan entre sí. Este entramado criminal se involucra en el tráfico de drogas, la extorsión y el juego ilegal, además de tener un notable control sobre la gestión de residuos y la construcción. Su estructura descentralizada le permite adaptarse rápidamente a los cambios del entorno criminal, manteniendo una fuerte influencia en la economía local.
Las organizaciones criminales de Bosnia y otros países de Europa del Este han cobrado relevancia en el crimen organizado internacional, operando en diversas actividades ilícitas que afectan tanto a la región como al resto del 'viejo continente'.
A diferencia de las mafias italianas o albanesas, las organizaciones criminales en Bosnia suelen ser menos estructuradas y operan como redes informales, adaptándose rápidamente a las circunstancias cambiantes del entorno delictivo.
En países como Serbia y Montenegro, las organizaciones criminales están igualmente involucradas en el tráfico de drogas y la trata de personas. Algunos grupos han forjado alianzas con cárteles latinoamericanos, facilitando el tráfico de cocaína hacia Europa.
La interconexión de estas organizaciones con cárteles de América Latina ha diversificado sus operaciones, aumentando su poder e influencia en el tráfico de drogas a nivel internacional. Las alianzas han permitido a estos grupos expandir su alcance y mejorar sus métodos operativos.
El consumo de drogas se ha convertido en un serio problema epidemiológico en Europa, afectando la salud pública y la seguridad en diversas naciones del continente.
Este incremento en el uso de drogas está asociado con una variedad de problemas de salud, que incluyen trastornos mentales y un aumento en las enfermedades infecciosas, como el VIH y la hepatitis C, especialmente entre los usuarios de drogas inyectables. Además, el número de muertes relacionadas con sobredosis ha ido en aumento, lo que plantea serias preocupaciones para los sistemas de salud pública de la región.
A pesar de que la crisis de opiáceos en Europa no es tan aguda como en Estados Unidos, el uso de medicamentos opioides y heroína ha generado alarma en varios países, llevando a un aumento en las sobredosis y, en consecuencia, en las muertes. Este fenómeno ha resaltado la necesidad de abordar la problemática desde múltiples frentes.
Ante esta situación, los sistemas de salud pública han implementado programas de prevención, tratamiento y rehabilitación, pero aún enfrentan desafíos significativos. La complejidad del problema exige una respuesta coordinada y efectiva tanto a nivel nacional como europeo, para mitigar el impacto del narcotráfico en la sociedad y mejorar la salud pública en el continente.
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