Tamara Falcó
Te contamos detalladamente el motivo por el que la ruptura de Tamara Falcó ha estado en el top de noticias de esta última semana de septiembre. Unas imágenes hicieron tambalear el futuro sentimental de la marquesa de Griñón.
La ruptura entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva ha sido el 'tema de la semana'. La marquesa de Griñón y el ingeniero dedicado al mundo de la noche han cesado su relación acaparando las portadas de las revistas del corazón, programas de televisión y tertulias y es que, poco antes de la ruptura habían anunciado a través de las redes sociales su compromiso matrimonial. Después de que salieran a la luz unas imágenes de Onieva en actitud muy cariñosa con otra mujer, la hija de Isabel Preysler borraba de sus redes sociales la imagen de la pedida de mano.
Son muchos los que han opinado sobre el tema del momento, entre ellos encontramos a Susanna Griso que confiesa entender porqué este tema se está comentando tanto y no son otros como la inflación o la guerra en Ucrania. Dice la presentadora que "creo que a veces necesitamos volver a la corrala, a ese patio de vecinos que nos permite comentar la ropa interior de la vecina del cuatro. Y esa corrala es hoy la vida de Tamara, un 'show de Truman' que hemos seguido desde que nació".
Y es que, como explica Susanna, la vida de Tamara ha sido pública con cada paso que ha dado: "hemos vivido sus amores y sus desamores, los años en los que abrazó la fe, y pensamos que se hacía monja, también cuando se puso el delantal de chef y hasta el momento en el que, por sorpresa, su padre le dejó en herencia el título de marquesa". De ahí que no debiera sorprender el grito de muchas de "Tamara somos todas" y que la gente "aunque sea solo por un ratito, se olviden de la inflación, de Putin y de los impuestos, para colarse en un cuento en el que las princesas no comen perdices".