Sanción
Llevar el vehículo sucio y que impida la visibilidad supone una importante infracción recogida en el Código de Tráfico y Seguridad Vial.
La época de frío e invierno es uno de los grandes enemigos para lograr mantener el vehículo limpio. Los cristales helados o llenos de hojas son el problema de muchos conductores que cuando tratan de coger el coche pierden tiempo en limpiarlo antes de salir a carretera.
Pero, ¿qué sucede si no se limpia correctamente? Llevar el vehículo sucio y que impida la visibilidad supone una importante infracción recogida en el Código de Tráfico y Seguridad Vial.
Según se indica en el Artículo 19 sobre "visibilidad en el vehículo", la superficie acristalada del mismo "deberá permitir, en todo caso, la visibilidad diáfana del conductor sobre toda la vía por la que circule". "Las infracciones a las normas de este precepto serán sancionadas", se indica.
¿Qué multa conlleva esta infracción?
Especialmente durante las heladas o las nevadas es cuando se puede cometer este tipo de infracción, ya que algunas partes del vehículo pueden quedar ocultas. Por ejemplo, "incumplir la obligación de todo conductor de verificar que las placas de matrícula del vehículo no presentan obstáculos que impidan o dificulten su lectura e identificación" se trata de una infracción grave que puede suponer hasta 200 euros de multa.
Además, es considerada como una infracción muy grave "circular con un vehículo que incumpla las condiciones técnicas que afecten gravemente a la seguridad vial".
En este caso la sanción puede alcanzar los 500 euros, según los artículos 76,77 y 80 del Real Decreto Legislativo 6/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial.
Técnica estrella para retirar el hielo del coche
Existen diferentes técnicas para conseguir retirar el hielo del coche. Pero algunas de ellas no resultan ser tan efectivas. Por ejemplo, echar agua caliente podría partir el cristal debido al cambio de temperatura extremo, pero tampoco se debe hacer con agua del tiempo pues puede suceder lo mismo.
El método estrella, aunque un poco más pesado y lento, es el raspador. Con él, se logra una retirada del hielo que permite circular prácticamente segundos después. Recuerda siempre revisar los puntos fundamentales del vehículo para mantener siempre la seguridad: luna delantera y trasera, matrícula, neumáticos, espejos retrovisores, etc.