¿Qué hacían sin ir al colegio y esperando a Justin Bieber?

Las vimos haciendo cola en Barcelona durante varios días seguidos. Adolescentes que querían asistir al concierto de Justin Bieber y no dudaron incluso en hacer noche para poder conseguir las entradas. El problema es que esos chicos y chicas eran escolares, y no dudaron en faltar a clase para poder ir al evento.

Otro dato añadido:  muchos padres estaban con ellos, conscientes de que sus hijos estaban perdiendo sus clases. Algunos se justifican asegurando que todos hemos sido adolescentes alguna vez y que conciertos como ése ocurren una vez en la vida.

Pero no convencen a todos. La consejera de Educación, Irene Rigau, ha dejado claro que los padres que consienten estos comportamientos se ponen al nivel de 'colegas' y abdican de su función educadora. Como último dato para la polémica, hay que añadir que la Guardia Urbana debería haber comunicado la presencia de los menores en edad escolar fuera de sus escuelas, algo que no hizo.