EXPLOSIONES CURIOSAS
Los sucesos relacionados con aparatos electrónicos que explotan y provocan incendios ocurren más veces de las que pensamos. En una oficina, un empleado dejó un portátil cargando durante toda la noche, y a las pocas horas explotó provocando un incendio en la habitación. También el teléfono de un niño de 12 años quedó chamuscado ya que estalló mientras se cargaba.
Esto se debe a que el aparato falla por un golpe, un sobrecalentamiento o una sobrecarga. Pero por lo general, esto ocurre cuando los cargadores que utilizamos no son los recomendados por la marca.
Otro caso: el de in niño que juega en el salón de casa subido a un patín y, de repente, empieza a echar humo y explota a escasos centímetros de su hermana.