TRAS HALLAR NUEVAS PISTAS
Agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de Gijón han reanudado este martes la búsqueda de la gijonesa Mari Trini Suardíaz y su bebé, desaparecidas en 1987 en unas propiedades de Berbes (Ribadesella), tras no haber encontrado nada este lunes durante las excavaciones practicadas, han confirmado a Europa Press desde la Comisaría gijonesa.
El caso, que quedó sin resolver en su día pero que cada cierto tiempo se reactiva al hallar nuevas pistas, la última vez en un pueblo de León, ha llevado en esta ocasión a una vivienda de la citada población asturiana, donde residió el matrimonio. La búsqueda ha sido autorizada por la magistrada del Juzgado de Instrucción número 4 de Gijón, Ana López Pandiella, a instancias de la Policía.
Cabe recordar que la investigación por la desaparición de la gijonesa y su bebé se inició por la denuncia del hermano de esta, que sospechaba de que el causante fuera el marido de la mujer. El marido de Suardíaz, no obstante, siempre alegó que ella desapareció voluntariamente con la hija de ambos.