Sevilla
Un hombre que se había atrincherado en una panadería de Sevilla con un arma poco antes de las 20:00 horas, ha sido detenido y ha salido del establecimiento tres horas después. Dos negociadores trabajaron durante casi dos horas para ponerse de acuerdo con él para que dejase el arma en el suelo y no ha opuesto resistencia. Por suerte, no se han producido heridos en el suceso.
El atrincherado había discutido previamente con el casero de su vivienda, llegando incluso a amenazarle con el arma en el portal de la casa, que se encontraba a escasos metros del establecimiento. Según afirman los testigos que se encontraban en el lugar de los hechos, el hombre se atrincheró en la panadería y obligó a todos los presentes a abandonar el establecimiento, quería quedarse solo para quitarse la vida. Minutos después, la dueña de la panadería llamó al 112 para informar de lo sucedido y poco antes, otro vecino llamaba al mismo número para advertir de que un varón estaba apuntando a otro con una pistola en un portal de la calle Estrella Castor.
La Policía informó que el individuo estaba dispuesto a disparar y activó de inmediato el protocolo habitual en estos casos. Rápidamente, una veintena de coches y 40 agentes acudieron a esa calle de Sevilla, obligando a cortar el tráfico.
Ha pasado la noche en el calabozo
El detenido fue trasladado a las dependencias centrales de la Policía Nacional en Sevilla, donde ha pasado la noche custodiado e investigado por un presunto delito de amenazas graves con arma de fuego. Cuando la Policía levantó el cordón policial y tras llevarse al detenido en el furgón, ha abierto el tráfico en la calle con normalidad.
Durante el tiempo que el hombre estuvo atrincherado, Emergencias Sevilla pidió a los presentes que no difundiesen imágenes de lo que estaba sucediendo, que mantuviesen la calma y que no usasen sus móviles para realizar llamadas telefónicas con el fin de no saturar las líneas.