Desalojo
No es una historia de Halloween aunque se acerque la fecha. Sorpresa en el cementerio de Lugo cuando una peregrina alemana decidió acampar en un nicho.
Halloween se acerca y los cementerios volverán a formar parte del paisaje de esta fiesta que cada vez tiene más adeptos. Lo que ha ocurrido en el cementerio de San Lázaro en Lugo parece sacado de una historia de miedo pero no lo es. Una turista alemana no ha tenido reparos en buscar acomodo en un nicho. Su plan no ha durado mucho.
La peregrina eligió un nicho para acomodarse
La Policía Local fue advertida el sábado de la presencia de la tienda de campaña por el párroco de la iglesia de San Lázaro, quien informó de que la peregrina había pasado la noche junto a las tumbas. La mujer recogió los bártulos sin protestar y continuó su caminata hacia Santiago.
Rocambolesca intervención de una patrulla de la Policía Local este pasado fin semana en Lugo. El sábado por la mañana los agentes recibieron en la Sala del 092 una llamada del cura de la iglesia de San Lázaro en la que les advertía de que una peregrina había acampado en el cementerio y había pasado allí la noche. La mujer había plantado su tienda de campaña sobre un nicho de tres alturas y había dormido entre las lápidas.
Le gustaban las vistas al río
Al llegar al cementerio de San Lázaro los municipales comprobaron que, efectivamente, la tienda de campaña permanecía en medio del camposanto y, en su interior, descansaba una mujer. Se identificó como una peregrina de nacionalidad alemana que estaba haciendo el Camino de Santiago y que, al llegar la hora de hacer un descanso en su ruta, había optado por hacerlo en el cementerio para retomar la marcha al amanecer.
Cuando fue informada de que allí no estaba permitido acampar, la infractora recogió sus bártulos de inmediato y abandonó el lugar sin protestar tras ser identificada. Según el testimonio de los vecinos, la explicación alegada por la peregrina era que desde esa sorprendente ubicación "podía tener vistas al río".