Restauración
La imagen había sufrido un deterioro por el paso del tiempo y las labores de subsanación han sido realizadas por el mismo imaginero que la talló.
La imagen de Nuestra Señora del Mayor Dolor y Traspaso, cotitular de la hermandad almeriense de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y San Juan Evangelista, fue retirada del culto hace unos meses para llevar a cabo una restauración que subsanase el deterioro que presentaba por el paso del tiempo.
La Junta de Gobierno de la cofradía aprobó que fuera el imaginero hispalense David Valenciano Larios quién se encargara de estos trabajos ya que también fue el autor de la talla en el año 2005.
Sin embargo, cuando la imagen ha regresado a la parroquia de San Pío X de El Zapillo, en Almería, y se ha expuesto al culto, se ha desatado la polémica: "Parece que le han hecho cirugía, como a los famosos. Yo la veo demasiado moderna para lo que es la Iglesia", afirma con sorpresa una de las feligresas de la parroquia.
Pero no es la única opinión en contra de la restauración de la Virgen, en las últimas horas los cofrades y devotos han llamado la atención, incluso en las redes sociales, sobre las evidentes diferencias que presenta la talla si la comparamos con la original: "Supuestamente la iban a reparar, pero la virgen ha quedado que parece otra directamente. Como si le hubieran pegado un cambiazo. Esto no es normal", apostilla uno de los devotos.
En lo que la mayoría de los vecinos coinciden es en que la imagen presenta un aspecto diferente, mucho más dulce en su expresión en el rostro y se aprecian notables diferencias en la nariz o el arqueado de las cejas.
Un rictus que presenta un dolor mucho más edulcorado al que muchos tendrán que acostumbrarse, aunque para otros haya resultado un acierto: "Fíjate que a mí me gusta más ahora. Antes decía yo: qué lástima, que la virgen es más fea por la nariz muy respingona. Y ahora está preciosa, yo no sé por qué la gente la critica", puntualiza otra vecina.
El tesorero de la Hermandad del Gran Poder de Almería, Iñaki Ruiz, aclara que la idea que se aprobó en el cabildo de hermanos era algo más que una restauración: "A la virgen se le ha sometido a un proceso de intervención porque tenía las manos raras y la cintura muy alta. Se propuso cambiar las manos, las articulaciones, la boca, la nariz, etc. El escultor talló la imagen siendo muy joven y ahora utiliza mejor esos mismos materiales. Él quiere lo mejor para la hermandad, igual que nosotros".
A pesar de la polémica y la disparidad de opiniones entre los devotos, la Virgen del Mayor Dolor ya está ataviada para recibir los cultos, y está previsto que el próximo sábado se lleve a cabo un rosario vespertino por las calles del barrio. Momento en el que los vecinos podrán apreciar con mayor detalle esta imagen restaurada que, a pesar de las diferencias, sigue despertando enorme devoción en su barrio.
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