CALIFICAN EL SUCESO DE "ASESINATO SOCIAL"
La plataforma de entidades LGTBI de Cataluña ha exigido "responsabilidades políticas" por el suicidio del joven transexual de 17 años Alan, ocurrido el pasado 24 de diciembre en Rubí (Barcelona) por el acoso escolar que padecía, y ha calificado el suceso de "asesinato social".
La plataforma recuerda que Cataluña cuenta con la 'Ley contra la LGTBIfobia' (la fobia contra Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales) desde octubre de 2014, "que enmarca de una forma muy clara las medidas y acciones necesarias para erradicar la transfobia de los centros escolares". "No entendemos cómo ha sido posible que los mecanismos que indica la ley no hayan sido implementados de forma absoluta en las escuelas en las que estudió Alan", señala la plataforma.
Recuerda además que el de este joven transexual no es un caso aislado, ya que el Observatorio Contra la Homofobia denunció en mayo pasado un caso de posible acoso escolar homófobo a un menor gay de 14 años en Girona que, al igual que Alan, tuvo que cambiar de escuela.
La plataforma considera que las actuaciones realizadas por la Generalitat no fueron las que marca el artículo 12 de la Ley contra la LGTBIfobia y subraya que "actualmente la violencia hacia los menores homosexuales, transexuales o bisexuales en las escuelas de Cataluña es una realidad que no podemos soportar más".
La plataforma exige por ello responsabilidades políticas y expresa su confianza en poder obtener dichas responsabilidades a través la investigación sobre el caso del suicidio de Alan que ha emprendido el Síndic de Greuges. Anuncia también que las diferentes entidades de la Plataforma han pedido una reunión "urgente y extraordinaria" del Consejo Nacional LGTBI, que preside la vicepresidenta del Govern y consellera de Bienestar Social y Familia en funciones, Neus Manté.
También ha instado a los diferentes Grupos Parlamentarios a que soliciten la comparecencia en el Parlament de Cataluña de Neus Munté y también de la consellera de Enseñanza en funciones, Irene Rigau.