COVID-19
El 20 % de los trabajadores de las residencias privadas se encuentra actualmente de baja por coronavirus, una situación que no ha hecho más que empeorar con el paso del tiempo.
Los temidos brotes de coronavirus en las residencias siempre han sido objeto de discusión para las medidas que había que tomar en España, especialmente en estos lugares donde cualquier medida de protección es considerada poca para los miedos que pueden surgir por el contagio de profesionales y de personas que están allí instaladas.
Ahora, el personal sanitario está viéndose especialmente lastrado, sobre todo en las residencias privadas, donde uno de cada cinco sanitarios, aproximadamente un 20%, está actualmente de baja por coronavirus, algo que ha originado un problema de cara a la atención a todos los allí presentes, y a trámites administrativos y otras gestiones.
Tanto es así, que antiguos sanitarios que ya se habían jubilado están empezando a trabajar en las residencias e incluso vacunan a los mayores que aún no tienen administrada la tercera dosis o incluso a aquellas personas inmunodeprimidas que requieren de una cuarta dosis, ante la mermada plantilla que hay actualmente en la mayoría de dichas residencias.
Debate por la tercera dosis
Personas mayores e inmunodeprimidas están requiriendo de una tercera dosis y hasta de una cuarta en determinados casos, debido a que su organismo suele perder el potencial de los anticuerpos pierde eficacia con el paso de los meses, por lo que estas dosis de refuerzo podrían ayudarles a generar la misma inmunización que en meses pasados.
No obstante, existe un debate acerca de si los más jóvenes deben vacunarse o no con la tercera dosis. Hay expertos que consideran que esta medida solo podría debilitar su organismo, por lo que no consideran necesario administrársela, pero sí que tengan puestas al menos las dos dosis que requiere la llamada "pauta de vacunación completa".
Entretanto, la franja mayor de 40 años continúa vacunándose a un gran ritmo. Más del 20 % de esta franja de edad ya se ha administrado una tercera dosis, siendo los mayores de 50 los que más han apostado por recibir esta dosis extra para reforzar su organismo y protegerse más de cara al coronavirus.