Volcán La Palma
Víctor es uno de los palmeros que tendrá que pasar la Navidad fuera de casa, que quedó sepultada por la lava. "Tenemos pocas perspectivas de futuro".
Comienza la cuenta atrás en el volcán de La Palma. Si en los próximos 9 días el Cumbre Vieja se mantiene dormido habría pasado la prueba definitiva para confirmar que el cráter se ha apagado totalmente. Hoy, casi todos los indicadores permanecen parados, a excepción de la sismicidad, que todavía está activa aunque con niveles mínimos.
Tercer día en silencio
A pesar de los buenos datos, los científicos continúan muy pendientes del volcán y mantienen el estado de emergencia porque la temperatura del Cumbre Vieja supera todavía los 400 grados. "Siempre estamos trabajando con probabilidades, entonces, es posible que estemos cerca del final, pero también cabe la posibilidad de que no sea así", explica Elena González, vulcanóloga del Instituto Geográfico Nacional (IGN).
Más de 500 personas siguen alojadas en hoteles
Durante los 3 meses de erupción volcánica, han sido muchas las personas que lo han perdido todo. Según el Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), todavía hay 554 personas albergadas en hoteles, 388 de ellas en Fuencaliente, 73 en Los Llanos de Aridane y 93 en Breña Baja. A ellos se suman más de 43 personas dependientes hospedadas en centros sociosanitarios de la isla.
"Sin trabajo, sin casa y sin nada"
Víctor es uno de los palmeros que tendrá que pasar la Navidad fuera de casa, que quedó sepultada por la lava. Ha sido realojado dos veces: el primer día de la erupción fue evacuado de Todoque y días más tarde tuvo que volver a abandonar la casa de sus padres, en la que se había resguardado, en La Laguna.
A esta situación se suma que ha perdido el trabajo que tenía en una platanera, también arrasada por el magma. "Tenemos pocas perspectivas de futuro porque estamos muy fastidiados con todo lo que ha sucedido. No sabemos nada y estamos perdidos".