Oso pardo
Los avistamientos de osos pardos en Villarino del Sil son diarios y muchos vecinos tienen miedo de salir de sus casas cuando anochece por si se los encuentran.
En los últimos 20 años, la población de osos pardos se ha multiplicado en provincias como León y eso lo notan sobre todos los vecinos del municipio de Villarino del Sil. De día y de noche se los encuentran paseando por las calles de la localidad.
Las visitas son prácticamente diarias. "Anda por los caminos como Pedro por su casa", nos cuenta Valentín, uno de los 40 habitantes de Villarino. Han cambiado rutinas por miedo. "Ahora ya no salimos de casa, ni de tarde ni nada porque anda por ahí", explica Angelines.
Cada vez es más frecuente verlos en los núcleos urbanos para buscar comida. Algunos vecinos han grabado a la osa que han llamado Lechuguina, subiendo a uno de los árboles y junto a algunas de sus crías. Angelines nos enseña un árbol con todas las ramas rotas, pero no es el único daño. A Valentín le ha comido las lechugas, "todito lo destroza". "Ahora como no tienen que comer es un peligro, te pueden pegar un manotazo", comenta Angelines.
"Las incursiones son diarias generando daños en las huertas, frutales y ganado", dice Roberto Fernández, alcalde de Palacios del Sil. Por el entorno de este municipio leonés, ya no solo han visto a Lechugina, también a varias de sus crías.
El alcalde de Palacios del Sil nos cuenta que han tenido varias reuniones con la Consejería de Medioambiente para analizar la situación y reconoce que si han puesto medidas para ahuyentarlos pero que no son suficientes.
Quieren que tomen cartas en el asunto. Y esa es precisamente la petición que le harán a la Junta de Castilla y León en la reunión que tienen el próximo miércoles.
Ellos están a favor de proteger a esta especie, que dicen es su seña de identidad, como durante tanto años han hecho y por eso ha podido aumentar el número de osos pardos, pero quieren que estén controlados y no perjudique en el día a día a los vecinos de la zona.