Coronavirus
El Ayuntamiento de Peñíscola ha redoblado la vigilancia en accesos tanto a la población, a urbanizaciones y a comercios y farmacias, incluso con barreras de hormigón, y ha pedido la colaboración vecinal para evitar que los foráneos acudan a sus segundas residencias durante la Semana Santa para intentar frenar la expansión del coronavirus.
En condiciones normales las poblaciones costeras se llenan durante la Semana Santa de visitantes, sin embargo la "operación salida" de este año está siendo excepcional por su ausencia debido a la pandemia de COVID-19.
La Policía Local, junto a la Guardia Civil, han acotado todos los accesos al municipio, y en aquellos en los que no hay control policial se han instalado barreras fijas de hormigón. Desde el consistorio han explicado que desde que se decretó el estado de alarma se ha conseguido un "confinamiento casi total" ya que los vecinos del municipio han cumplido de manera notable con las restricciones de movilidad.
El Ayuntamiento ha pedido a la Subdelegación del Gobierno en Castellón un refuerzo de los efectivos de la Guardia Civil e incluso del Ejército para poder seguir controlando los accesos a la población.
Además, el consistorio ha pedido la colaboración tanto a los vecinos como a los propietarios de los establecimientos y se pide que si se detecta la presencia de un vecino alojado en una segunda residencia, se dé parte a la Policía Local para que pueda proceder a hacer la comprobación.