Dieta del potito
Una vez se abandona la dieta del potito se vuelve a los anteriores hábitos y además el peso también se recupera.
La dieta del potito consiste en llevar una alimentación a base de comida de papilla para bebé con el objetivo de perder peso. Además, la dieta permite una ingesta diaria de hasta 14 potitos elaborados a base de cereales, verduras y frutas.
La dieta del bebé ó dieta del potito ya se puso de moda por las actrices Jennifer Aniston y Gwyneth Paltrow allá por el año 2010 pero muchos expertos aseguran que es "peligrosa" y "absurda" quienes recuerdan que estas dietas ponen en riesgo la salud de la población, ya que "no tiene ninguna base científica que las sostenga", se convierten en una "moda sin control", y "se aleja de una dieta saludable".
Además, al ser una dieta que no te educa en hábitos y conductas saludables, una vez se deja, se vuelve a los anteriores hábitos y el peso también se recupera. Se daría el famoso efecto yoyo.
Principales problemas de la dieta del potito
Esta dieta genera una restricción calórica y de micro y macronutrientes (vitaminas, minerales, hidratos de carbono, grasas o proteínas) alta, por lo que puede condicionar mucho las necesidades del cuerpo. Cabe destacar que estos potitos no aportan todos los nutrientes que el cuerpo necesita para llevar a cabo sus funciones vitales. Además falta la ingesta de hidratos de carbono más completos como proteínas o grasas.
La dieta del potito, puede aumentar el riesgo de desarrollar una mala relación con la comida, ya que fomentan la restricción y prohibición por ciertos alimentos, generando culpa o remordimientos en el caso de consumirlos, obsesión e incluso ansiedad.
Parece que estas dietas proliferen cada verano, casi siempre llevadas a cabo por personas que quieren ganar adeptos y con perjuicio directo contra las personas que padecen obesidad.
Los expertos recuerdan lo importante que es alejarse de cualquier dieta que prometa resultados rápidos con el mínimo esfuerzo que pueda poner en riesgo la salud de la persona.