Aviones
En su interior viajaban 284 personas. La compañía asegura que los heridos no llevaban puesto el cinturón de seguridad a pesar de los avisos, una versión que niegan los propios afectados.
Pánico en el interior de un avión. La madrugada de este miércoles, 12 personas resultaban heridas en el vuelo Madrid-Buenos Aires a consecuencias de las fuertes turbulencias que se producían en el trayecto.
El hecho, tal y como ha explicado la compañía, 'Aerolíneas Argentinas', en un comunicado oficial, se produjo "sobre el océano Atlántico, entrando al continente americano". Las fuertes rachas de viento provocaron fuertes y continuadas turbulencias por las que 3 personas tuvieron que ser trasladadas para un control más exhaustivo.
La empresa asegura que los pasajeros afectados "no tenían puesto el cinturón de seguridad" a pesar de que, al parecer, se había realizado el anuncio correspondiente por parte de la tripulación y "se encontraban encendidos los carteles indicadores".
Algunas imágenes grabadas por los pasajeros muestran cómo algunos de los afectados llegaron a romper incluso el techo tras salir despedidos de su sillón. Cientos de objetos cayeron al suelo de la aeronave mientras el pánico se apoderaba de todos los pasajeros.
Los pasajeros niegan la versión de la compañía
Los afectados, sin embargo, niegan la versión de la aerolínea y explican que ese aviso nunca se produjo.
"He sido de las más afectadas y posiblemente tenga el tabique de la nariz roto. Choqué mi cabeza con el techo y lo partí. Sí, tuve las 7 horas el cinturón puesto y, justo al quitármelo, pasó, pero no había aviso ninguno", explica una joven en su cuenta de Twitter.
Adrián Torres, otro de los españoles que realizaba este proyecto, cuenta a 'Antena 3 Noticias' cómo fue el momento exacto del incidente: "Estábamos prácticamente en mitad del mar. El avión bajó mucho y, al bajar tan rápido, salimos todos despedidos hacia arriba. El único aviso de megafonía fue a los 5 minutos, diciendo que habíamos tenido turbulencias, cosa que ya era bastante clara porque habíamos salido volando, literalmente", explica. "Todo el mundo salió volando, hasta las azafatas por el pasillo. En el comunicado oficial dicen que sí estaban encendidas las luces. Es una mentira enorme. Qué impotencia".
En el momento del incidente quedaban aún 7 horas de trayecto que, al parecer, resultaron ser "una auténtica pesadilla".