Toledo
Sergio y Tamara vivieron un momento muy emocionante, a la vez que de tensión. Recibieron a su segundo hijo en el coche, pues el pequeño Erik no podía esperar más para llegar a este mundo. Así relata el padre la experiencia.
Se podría hablar de un auténtico milagro el de esta familia. A Tamara y a Sergio no les dio tiempo a llegar al hospital para que la mujer diera a luz en el centro médico, pues el pequeño Erik llegaba con fuerza a este mundo. Salieron de Escalona dirección Toledo junto a su otro hijo menor, pero cuando solo llevaban 15 de los 55 kilómetros que debían recorrer, tuvieron que parar en una gasolinera para recibir al bebé, pues cuenta Sergio, el padre: "yo iba conduciendo y ella rompió aguas. Me dijo 'para, que me he metido la mano en la malla y tengo la cabeza fuera'".
Pararon en la gasolinera más cercana, donde tuvieron la suerte de encontrarse con una enfermera que asistió el parto hasta que llegaron los servicios médicos: "cuando fui a la puerta del copiloto, estaba echando el niño, lo cogí, me puse muy nervioso al cogerlo porque no respiraba y no se movía y me puse a llorar y a gritar para que me ayudaran. De repente, apareció una enfermera, se lo pasé a ella y lo empezó a reanimar". Aunque por los nervios de la situación ni siquiera saben su nombre, Sergio y Tamara recordarán a esta enfermera, o más bien ángel de la guardia, para siempre. En todo momento les mostró su cariño y ánimo. "Papi enhorabuena, y tú campeona", les decía en todo momento la mujer.
Fue todo muy rápido. Tamara dio a luz en el asiento del copiloto del coche, mientras su otro hijo pequeño presenciaba la escena desde el asiento de atrás. Al padre se le caía la baba con el bebé y la madre fue trasladad en ambulancia,muy feliz y tranquila.
Manu Sánchez ha hablado en directo con Sergio García, el padre del bebé, en las Noticias de la Mañana. El padre cuenta que tanto el bebé como la madre "se encuentran muy bien, llegaron al hospital y todo está perfecto. Le hicieron las pruebas y sin ningún problema. Pesa 3.300 y la verdad que muy bien".
Para él. los primeros momentos fueron de nervios y tensión pues veía que la llegada del niño era inminente, pero cuenta que "ella se comportó como una campeona porque en ningún momento perdió los nervios, los perdí yo más que ella".