Seguridad vial
Carlos Sainz es uno de los grandes pilotos españoles. Ahora el madrileño da un paso más impulsando un curso de seguridad vial. Su objetivo es cambiar los malos hábitos al volante para reducir el número de víctimas y de accidentes.
Es uno de los grandes pilotos españoles. Carlos Sainz ha competido en los rallys de todo el planeta. Alzándose dos veces como campeón del mundo de rally en 1990 y 1992 con Toyota y logrando otros cuatro subcampeonatos y cinco terceros puestos. Acostumbrado al riesgo extremo y a la velocidad. Siempre reaccionando a imprevistos de manera impecable. Y destacando por mantener una concentración máxima en la carretera. Ahora el madrileño da un paso más y emprende una nueva aventura para enseñar algunas de esas técnicas a aquellos conductores que cogen el coche en su día a día.
Siempre con la seguridad vial
Durante su larga trayectoria siempre ha tenido inquietud por conducir de la manera más segura. Además, Sainz es miembro del comité de expertos y del jurado de los premios Ponle Freno, la plataforma de esta casa, ATRESMEDIA, por la seguridad vial. Con este compromiso el nuevo curso impulsado por el piloto en el centro 'Carlos Sainz Karting' del Parque Empresarial Európolis- Las Rozas, en Madrid. Una formación innovadora para reducir el número de accidentes de tráfico y de víctimas en las carreteras españolas. "La mayoría de los accidentes se producen en los trayectos cotidianos donde la confianza es mayor y se presta menos atención cuando vamos al volante", dice Carlos.
Champions Skills for Safety
Esta iniciativa se llama 'Champions Skill for Safety' y pone el acento en el desarrollo de la actitud de los conductores. El principal objetivo de este curso es "cambiar esas creencias y esos hábitos erróneos" que los conductores tienen a la hora de conducir. Sobre todo los que se deben a despistes o falta de concentración como usar el teléfono móvil o ir desconcentrado cuando estamos al volante. Según el campeón español de rally está demostrado que es en esos momentos de distracción cuando más accidentes se producen. Por eso el curso combina una parte más teórica con simuladores y juegos de agilidad mental.
Circuito de karting pero sin velocidad
En la formación también hay tiempo para ponerse el mono y el casco y bajar a la pista de karting. Allí se realizar diversos ejercicios con la intención de estar más centrados en la carretera. Se hacen pruebas con señales de tráfico que avisan de carriles cortados, tramos con curvas o si nos acercamos a un paso de peatones. En la presentación del nuevo curso el piloto deja claro que "es un curso de seguridad vial para ser mejor conductor, no para ser mejor piloto, aquí no tiene que ver nada que ver la velocidad". Una iniciativa que demuestra que la actitud es vital a la hora de coger el coche, por encima de saber conducir.